• Juan Manuel García Casañas denuncia que a dos meses de finalizar el año, las partidas previstas en el Plan de Viabilidad de Cofradías y Asociaciones de Pescadores aún no se han ejecutado
• “A los problemas crónicos que sufre este sector hay que añadir los derivados del aumento de los costes de materias primas que hacen imposible la rentabilidad de una profesión dura”
• El diputado popular denuncia que “la falta de estas inversiones, que se necesitaban para ayer, pone en jaque la supervivencia, independencia y desarrollo de esta actividad”

El diputado del Grupo Parlamentario Popular, Juan Manuel García Casañas, aseguró hoy que “el Gobierno de Canarias ha dejado huérfanas a las cofradías y asociaciones de pescadores de las islas” y afirmó que “el retraso en la ejecución de las partidas contempladas en los presupuestos para 2022 está poniendo en jaque la supervivencia, la independencia y el desarrollo de esta actividad”.

Casañas, que preguntó a la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca sobre la situación del Plan de Viabilidad de Cofradías y Asociaciones de Pescadores previstos en las cuentas de este año, denunció que “a dos meses de finalizar este 2022, las partidas previstas en dicho plan aún no se han ejecutado”.

“Los cofrades demandan infraestructuras y modificaciones normativas de reglamentos que les permita desarrollar su actividad con normalidad y mantener un sector estratégico para Canarias, pero sobre todo celeridad en la ejecución de las inversiones prometidas y previstas en los presupuestos”, indicó.

En este sentido, el diputado popular recordó que “a los problemas crónicos que sufre este sector hay que añadir los derivados del aumento de los costes de materias primas, fundamentalmente el combustible, la luz y el acero, que hacen imposible la rentabilidad de una profesión dura”.

“Además de agilizar las inversiones para equipamiento o funcionamiento, el sector necesita un plan que dote de recursos, de autonomía y de seguridad jurídica a cada una de las cofradías”, indicó el diputado popular, para quien “solo así evitaríamos situaciones como que alguna cofradía lleve dos años esperando por un trávelin, cinco por una máquina de hielo o por la cesión de determinadas instalaciones que les permitiría poder cubrir sus gastos de personal y mantenimiento sin necesidad de subvenciones”.

Por último, Juan Manuel Casañas insistió en que “la política pesquera de este gobierno ha sido desastrosa y año tras año el sector se ha ido reduciendo como consecuencia de la falta de planificación, pero sobre todo por la falta de comunicación con las cofradías que ha impedido dotarlas de lo que necesitan para que no dependan de la administración”.