El diputado autonómico del Partido Popular, Víctor Moreno, señaló hoy que apenas 59 funcionarios del Cuerpo General de la Policía Canaria se encuentran en servicio activo en la actualidad, lo cual equivale a un 20% de la relación de puestos de trabajo, compuesta por 300 personas.

“El Gobierno regional, vista la inutilidad de un gasto anual de 4,2 millones en Seguridad ciudadana, debería aprovechar que mañana es el Día de la Policía Canaria, para anunciar su disolución”, declaró Moreno.

Según la documentación remitida al diputado del PP el pasado 15 de mayo, el Gobierno regional reconoce que están en activo 94 funcionarios, de los cuales 14 se encuentran en comisión de servicio y 21 están en excedencia. “Por tanto –indicó-, 59 funcionarios forman parte de esta entidad que, según los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma, costarán a los canarios este año 4,2 millones de euros, de los cuales 4 millones se reservan para el pago de sueldos”.

“Todos recordamos que Paulino Rivero anunció hace apenas tres años que la Policía Canaria tendría 1.700 efectivos, y estos datos oficiales que nos hace llegar su propio Gobierno nos muestran un Cuerpo cuestionado y caro que no tiene utilidad alguna, un verdadero lujo del que tendríamos que prescindir en la actual situación de emergencia social”, afirmó Víctor Moreno.

El diputado del PP, además, preguntará al Ejecutivo regional cuántos de estos 59 funcionarios en activo están realmente patrullando las calles, “puesto que nos consta que el Cuerpo dispone tan solo de 100 policías, 50 por provincia”.

“Llama la atención que el Gobierno regional pretenda celebrar mañana el Día de la Policía Canaria, cuando tan solo 59 personas forman parte del Cuerpo, que además está inmerso en una ambiente laboral de enorme tensión y descontento, incluidas las acusaciones de acoso laboral y abusos de autoridad que han puesto de manifiesto los sindicatos en los últimos meses”, concluyó.

La diputada autonómica del Partido Popular, Astrid Pérez, manifestó hoy que el Ejecutivo regional admite haber invertido solo un 0,8% de los 7 millones de euros previstos para las campañas de marketing turístico invierno 2012 – verano 2013, cofinanciados por la Unión Europea. “En plena crisis del sector, Canarias no ha tenido campaña de promoción alguna por culpa de la ineptitud de este Gobierno”, remarcó.

A una pregunta formulada por Pérez sobre la inversión realizada en la promoción y comercialización del destino turístico Islas Canarias, el Ejecutivo reconoció que solo ha invertido 60.000 euros del total previsto para marketing, “lo que nos da la razón cuando acusamos al Gobierno de ineptitud, al haber desperdiciado dinero para campañas procedente del Fondo Europeo de Desarrollo Regional”.

“Ya denunciamos que dedicar solo 7 millones de euros a promocionar las islas en plena crisis económica era insuficiente, cuando en años anteriores esta comunidad autónoma ha llegado a invertir el triple –remarcó-, pero ejecutar tan solo 60.000 euros es demostrativo de la incompetencia de este Gobierno”.

La diputada del PP recordó que esta campaña debió comenzar en septiembre de 2012, “como recoge el famoso plan de Turismo 2013-2016 del que tanto presume este Gobierno, que a día de hoy es papel mojado”.

“Canarias lleva dos años sin promoción turística y, sin embargo, el Gobierno pretende presentar ahora su campaña de comunicación y marketing para 2013, unas acciones que llegan nueve meses tarde y solo servirán para que Paulino Rivero se haga autobombo a costa de nuestro principal sector productivo, el único que está tirando de la economía canaria”, concluyó.

El Partido Popular llevará al próximo pleno del Parlamento de Canarias cinco propuestas urgentes “para detener el caos sanitario en las Islas”, que Mercedes Roldós atribuye directamente “a la incapacidad de la consejera Brígida Mendoza, y a la irresponsabilidad del presidente Rivero, por mantenerla en el cargo”.

Según explica en su moción la portavoz popular de Sanidad, Mercedes Roldós, “la calidad de la asistencia sanitaria en Canarias ha sufrido un grave deterioro en el último año, que empieza a resultar alarmante y causa seria preocupación en la opinión pública en general, y particularmente en los pacientes, profesionales, entidades colaboradoras, proveedores y asociaciones del sector”.

En el último pleno, Roldós interpeló en este sentido a la consejera Mendoza, para demostrar “que no estamos ante un problema de ajuste presupuestario, sino ante un déficit de gestión escandaloso, que pone en riesgo la salud de los canarios”. La última encuesta del CIS establece que el 38,7% de los canarios considera la situación de la sanidad el primer problema de Canarias, frente al 7,9% de la media nacional, casi cinco veces más.

Los populares sostienen que la situación “está al límite y al borde del colapso”, y advierten de la necesidad de tomar decisiones urgentes “para evitar daños irreparables”. Las cinco “recetas imprescindibles” propuestas por Roldós pasan por un auténtico Plan de Choque contra las Listas de Espera, con ficha financiera, medidas organizativas y objetivos, para atender a los más 57.000 pacientes que hoy esperan por una intervención quirúrgica o una consulta de especialista.

La segunda medida pasa por la aprobación del Plan de Salud de Canarias, que lleva más de dos años de retraso, y que supone la herramienta básica para la planificación de los recursos sanitarios. También plantea la elaboración del Plan de Infraestructuras Sanitarias, para resolver proyectos pendientes como los hospitales del norte y del sur de Tenerife, la renovación del Materno Infantil en Las Palmas, y el hospital de Fuerteventura, entre otros equipamientos.

Así mismo, plantea la elaboración de un Plan de Recursos Humanos que reordene la plantilla del Servicio Canario de Salud, que este año prevé una disminución de más de 3.800 profesionales, y la jubilación de más de 140 médicos.

Por último, Roldós se refiere a la necesidad de dotar a la provincia de Las Palmas del número de aceleradores lineales necesarios para atender a su población de referencia, una carencia que está ocasionando serias dificultades en el tratamiento de patologías oncológicas.