• Miguel Ángel Ponce denuncia que los tiempos de espera duplican los recomendados en los protocolos sanitarios “pasando de los dos meses previstos hasta cuatro o cinco meses”
• El portavoz en materia de Sanidad alerta que un retraso en el diagnóstico puede suponer la diferencia entre vivir o morir
• Recuerda que según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, Canarias se situó como la comunidad con más excesos de fallecimientos por tumores

El diputado del Grupo Parlamentario Popular y portavoz en materia sanitaria, Miguel Ángel Ponce, calificó hoy de “escandalosa” la demora en los diagnósticos y tratamientos a los pacientes con cáncer de mama en Canarias, “unos tiempos de espera excesivos que duplican los recomendados en los protocolos sanitarios, pasando de los dos meses previstos hasta alcanzar los cuatro o cinco meses reales”.

El diputado popular señaló, tras la intervención de la presidenta de la Asociación de Cáncer de Mama de Tenerife (Ámate) en la comisión parlamentaria de Sanidad, que “en lo referente a la atención oncológica las cosas en Canarias no van bien” y recordó que tanto en listas de espera, pruebas complementarios y consultas “Canarias está a la cola del país”.

En este sentido, Ponce detalló que “para una consulta los tiempos de espera superan los cuatro meses, a los que hay que añadir los más de dos meses y medio que se aguardan para la realización de una mamografía. Unos retrasos  que son inasumibles y que pueden suponen la diferencia entre vivir o morir”.

Asimismo, alertó que según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Canarias se situó en el primer semestre del año pasado como la comunidad con más excesos de fallecimientos por tumores, por lo que a su juicio urge “modificar el plan Aborda puesto en marcha por el Gobierno para reducir las listas de espera y ofrecer a estos pacientes la atención prevista en los protocolos”.

Tras constatar el fracaso del Plan Aborda, Ponce recordó que el Partido Popular lleva meses ofreciendo un plan de rescate de la sanidad canaria que, entre otros objetivos, contaba con propuestas para reducir las listas de espera, mejorar las urgencias y potenciar las infraestructuras sociosanitarias y la atención primaria.

En concreto, para mejorar la atención a los pacientes con cáncer se solicitaba un plan de contingencia asistencial para dar preferencia a estos enfermos, que contara con todos los recursos tanto públicos como concertados, y con protocolos específicos preferentes con acceso a consultas y pruebas por rutas diferenciadas; la creación de la Gerencia Única para gestionar los diferentes tiempos de espera entre los hospitales de Canarias, así como atraer y fomentar las plazas MIR en el área de oncología ante la carencia de especialista en las islas.